Proyecciones
ORLANDO, PRESENTE EN LA PROYECCIÓN DE MÓSTOLES
La matanza de Orlando estuvo muy presente en la proyección de El viaje de Carla en Móstoles. Un acto que tuvo un significado muy especial para mí -por partida doble- pero también para Carla Antonelli.
En esta ciudad de la periferia madrileña empecé mi trayectoria profesional hace más de treinta años. En concreto, en la emisora de la Cadena SER, donde, literalmente, hice de todo. Así lo recordé en la presentación del documental.
Antes, nos hicimos unas fotos en el vestíbulo del Centro Cultural Norte-Universidad. Con la concejala de Bienestar Social, Sanidad e Igualdad, Ana María Rodrigo, con la encargada de organizar el acto, Beatriz Benavides…
…y con Borja Costa, responsable de la banda sonora del documental. ¡¡ Era la primera vez que lo veía en pantalla grande !! Me hizo ilusión que nos acompañara (buena parte de la conmoción que produce el documental en el corazón del espectador tiene su origen en su excepcional trabajo), y creo que Borja también tenía ganas de verlo con nosotros.
Ya en el escenario, la concejala pidió un minuto de silencio en memoria de las víctimas de la matanza de orlando (EEUU).
En la presentación, Carla se emocionó (también durante el coloquio posterior). Era un día muy especial para ella también, porque era la primera proyección después de haber sufrido una pérdida familiar. No llegó a romperse, porque es una mujer de un enorme coraje, pero quizá estaba más sensible que en otras ocasiones.
Abrimos después el coloquio, que estuvo muy animado, con Carla «en su salsa», poniendo «toda la carne en el asador». En el escenario, dos sillas en memoria de los ausentes.
Había en la sala una mujer tinerfeña a quien las imágenes de Canarias le evocaron muchos recuerdos. Otra espectadora incidió en la necesaria pedagogía en todo lo referente a la diversidad afectivo-sexual.
La concejala cerró el acto recordando que se cumplía un año de la toma de posesión del equipo de gobierno municipal.
Al final, firma de carteles y más fotos.
Gracias, Móstoles, por acogernos.
El viaje continúa…